Cuando decidí presentarme a las elecciones para la elección de la nueva junta directiva del Colegio de Médicos de Castellón lo hice, en primer lugar, porque creo que la renovación no solo es positiva sino necesaria en las instituciones públicas.
Independientemente de la gestión que se haya realizado por anteriores juntas directivas, siempre es bueno un cambio de personas que aporten nuevas ideas y puntos de vista. En este sentido la candidatura encabezada por José Mª Breva ofrece muchas posibilidades al estar formada por personas de distintas edades, ideas y procedencia profesional. La primera idea que creo que se debe poner en práctica es aumentar la participación en las decisiones del colegio. Sin duda, facilitar la participación de los colegiados en la toma de decisiones, es democratizar el colegio. Por ello la primera de las actuaciones que debe emprender la nueva junta es la modificación de los estatutos para permitir la participación por medios telemáticos. Igualmente nos comprometemos a someter a decisión de los colegiados mediante consulta, las decisiones mas importantes, como sin duda será el futuro de la sede colegial.
Esto último y la publicación las cuentas anuales extendiendo la información a todos los colegiados, mejorará la transparencia que es otro de los ejes fundamentales de nuestra candidatura. Vamos a poner todo nuestro esfuerzo para que el colegio deje de ser el lugar al que vamos por Navidad a comprar lotería. Para ello el colegio debe abandonar la comodidad institucional e implicarse en los problemas que afectan realmente a los médicos. La precariedad laboral alcanza porcentajes intolerables y en este sentido nos comprometemos a exigir a la Consellería de Sanidad oposiciones y concursos de traslados con periodicidad razonable y tribunales de oposición por sorteo. Para ello solicitaremos, en colaboración con los colegios de Valencia y Alicante, reunirnos de forma inmediata con la consellera de Sanidad.
Las agresiones a los médicos son otro problema lamentablemente cada vez más habitual. En este sentido es de agradecer la labor en la defensa del médico iniciada por las anteriores directivas. Nos comprometemos a incrementar dichas actuaciones con todas las medidas, de todo tipo, que estén a nuestro alcance con el mayor rigor y firmeza. Son muchas las tareas pendientes y probablemente no procede extenderse en esta presentación pero sin duda todas ellas irán encaminadas a la democratización, la participación, la transparencia y la defensa de la profesión médica, para que el colegio sea percibido como una institución cercana y próxima que defiende los intereses reales de los colegiados.
Carlos Díaz Ramón
Radiologo del Hospital Rey D.Jaime
Castellón
